¿Te has preguntado alguna vez qué tipo de corte de pelo te queda mejor? Elegir un buen corte de pelo no es una tarea fácil, ya que depende de muchos factores como la forma de tu rostro, tu estilo, tu personalidad y el cuidado que le des a tu cabello. Un corte de pelo adecuado puede resaltar tus rasgos, expresar tu identidad y hacerte sentir más cómodo y seguro.
En este artículo te vamos a mostrar cómo identificar tu forma de rostro y qué tipo de corte te favorece más según tu óvalo facial. También te vamos a dar ejemplos de cortes para cada estilo y personalidad, así como consejos para cuidar tu cabello y mantenerlo saludable. Al final del artículo esperamos que tengas una idea más clara sobre qué tipo de corte de pelo te recomiendan los expertos.
Tipos de cortes de pelo según tu forma de rostro
Lo primero que debes saber es qué forma tiene tu rostro. Para ello, puedes mirarte al espejo o tomar una foto frontal y trazar una línea imaginaria alrededor del contorno de tu cara. Así podrás ver si tu rostro es redondo, ovalado, cuadrado, rectangular, triangular, diamante o corazón.
Cada forma de rostro tiene sus características y requiere un tipo de corte de pelo que las equilibre y armonice. A continuación te mostramos algunos ejemplos de cortes de pelo para cada forma de rostro:
Rostro redondo
Si tu rostro es redondo, significa que tiene la misma anchura que altura, y que tus rasgos son suaves y redondeados. El objetivo es alargar tu rostro y crear ángulos que lo definan. Por eso, te convienen los cortes de pelo con volumen en la parte superior, con flequillo largo y desfilado, con capas largas y asimétricas, o con raya al lado. Evita los cortes muy cortos, muy lisos o muy pegados a la cara.
Rostro ovalado
Si tu rostro es ovalado, significa que es más largo que ancho, y que tus rasgos son proporcionados y equilibrados. El objetivo es resaltar tu óvalo facial y evitar que se vea más alargado. Por eso, te quedan bien casi todos los tipos de cortes de pelo, desde los más cortos hasta los más largos, con o sin flequillo, con o sin capas, con o sin rizos. Lo único que debes evitar son los cortes muy voluminosos en la parte superior o muy planos en los laterales.
Rostro cuadrado
Si tu rostro es cuadrado, significa que tiene la misma anchura en la frente, las mejillas y el mentón, y que tus rasgos son angulosos y marcados. El objetivo es suavizar tus ángulos y crear curvas que los atenúen. Por eso, te favorecen los cortes de pelo con movimiento, con ondas o rizos, con flequillo redondeado o lateral, con capas suaves o desfiladas, o con raya al medio. Evita los cortes muy rectos, muy geométricos o muy pegados a la cara.
Rostro rectangular
Si tu rostro es rectangular, significa que es más largo que ancho, y que tus rasgos son angulosos y alargados. El objetivo es acortar tu rostro y crear volumen en los laterales. Por eso, te sientan bien los cortes de pelo con longitud media o corta, con flequillo recto o tupido, con capas a la altura de las mejillas o del mentón, o con raya al lado. Evita los cortes muy largos, muy lisos o muy estrechos.
Rostro triangular
Si tu rostro es triangular, significa que tiene la frente más ancha que el mentón, y que tus rasgos son afilados y descendentes. El objetivo es equilibrar tu rostro y crear volumen en la parte inferior.
Por eso, te quedan bien los cortes de pelo con longitud media o larga, con flequillo largo o diagonal, con capas a la altura del mentón o de los hombros, o con raya al medio. Evita los cortes muy cortos, muy voluminosos en la parte superior o muy escasos en la parte inferior.
Rostro diamante
Si tu rostro es diamante, significa que tiene las mejillas más anchas que la frente y el mentón, y que tus rasgos son angulosos y ascendentes. El objetivo es resaltar tus pómulos y crear simetría en tu rostro. Por eso, te favorecen los cortes de pelo con longitud media o larga, con flequillo recto o desfilado, con capas a la altura de las mejillas o del mentón, o con raya al lado. Evita los cortes muy
cortos, muy lisos o muy pegados a la cara.
Rostro corazón
Si tu rostro es corazón, significa que tiene la frente más ancha que las mejillas y el mentón, y que tus rasgos son dulces y ascendentes. El objetivo es suavizar tu frente y crear volumen en la parte inferior. Por eso, te sientan bien los cortes de pelo con longitud media o corta, con flequillo lateral o desfilado, con capas a la altura de las mejillas o del mentón, o con raya al medio. Evita los cortes muy largos, muy voluminosos en la parte superior o muy escasos en la parte inferior.
Cómo elegir tu corte de pelo según tu estilo y personalidad
Además de la forma de tu rostro, otro factor que debes tener en cuenta a la hora de elegir tu corte de pelo es tu estilo y personalidad. Tu corte de pelo puede reflejar tu identidad y expresar cómo te sientes y cómo quieres que te vean los demás. También puedes adaptar tu corte de pelo a diferentes ocasiones y tendencias, según el efecto que quieras lograr.
A continuación te mostramos algunos ejemplos de cortes de pelo para cada estilo y personalidad:
Estilo clásico
Si tu estilo es clásico, significa que te gustan los cortes de pelo elegantes, sobrios y atemporales, que no pasan de moda y que te dan un aspecto refinado y profesional. El objetivo es mantener un corte de pelo limpio, ordenado y fácil de peinar. Por eso, te convienen los cortes de pelo con longitud media o corta, con raya al lado o al medio, con flequillo recto o lateral, con capas sutiles o sin capas, con o sin volumen.
Estilo moderno
Si tu estilo es moderno, significa que te gustan los cortes de pelo innovadores, originales y vanguardistas, que siguen las últimas tendencias y que te dan un aspecto juvenil y divertido. El objetivo es experimentar con diferentes cortes de pelo, colores y accesorios. Por eso, te quedan bien los cortes de pelo con longitud variable, con raya al lado o sin raya, con flequillo largo o corto, con capas asimétricas o desfiladas, con mucho o poco volumen.
Estilo bohemio
Si tu estilo es bohemio, significa que te gustan los cortes de pelo naturales, relajados y desenfadados, que reflejan tu espíritu libre y creativo. El objetivo es lucir un corte de pelo suelto, fluido y con movimiento. Por eso, te favorecen los cortes de pelo con longitud larga o media, con raya al medio o sin raya, con flequillo abierto o sin flequillo, con capas largas o sin capas, con ondas o rizos.
Estilo rebelde
Si tu estilo es rebelde, significa que te gustan los cortes de pelo atrevidos, rompedores y transgresores, que muestran tu personalidad fuerte e independiente. El objetivo es destacar con un corte de pelo llamativo, arriesgado y diferente. Por eso, te sientan bien los cortes de pelo con longitud corta o muy corta, con raya al lado o sin raya, con flequillo tupido o despeinado, con capas cortas o rasuradas, con mucho volumen o textura.
Estilo romántico
Si tu estilo es romántico, significa que te gustan los cortes de pelo delicados, femeninos y dulces, que resaltan tu belleza natural y tierna. El objetivo es lucir un corte de pelo suave, liso y brillante. Por eso, te quedan bien los cortes de pelo con longitud media o larga, con raya al lado o al medio, con flequillo redondeado o lateral, con capas suaves o sin capas, con o sin ondas.
Cómo cuidar tu corte de pelo y mantenerlo saludable
Ya sea que tengas un rostro redondo, ovalado, cuadrado, rectangular, triangular, diamante o corazón, y que tu estilo sea clásico, moderno, bohemio, rebelde o romántico, lo más importante es que cuides tu corte de pelo y lo mantengas saludable. Para ello, debes seguir algunos consejos básicos que te ayudarán a tener un cabello bonito, fuerte y sano.
A continuación te mostramos algunos consejos para cuidar tu corte de pelo y mantenerlo saludable:
Lava tu cabello con el champú adecuado
No todos los cabellos son iguales, por lo que debes elegir el champú que mejor se adapte a tu tipo de cabello: seco, graso, normal, mixto, rizado, liso, teñido, etc. El champú debe limpiar tu cabello sin resecarlo ni engrasarlo, y debe aportarle los nutrientes que necesita. Usa una cantidad moderada de champú y masajea tu cuero cabelludo con suavidad. Enjuaga bien tu cabello con agua tibia o fría.
Acondiciona tu cabello con el producto adecuado
Después de lavar tu cabello con el champú adecuado, debes aplicar un acondicionador o una mascarilla que hidrate y suavice tu cabello. El producto debe ser adecuado para tu tipo de cabello y para el tipo de corte de pelo que tengas. Aplica el producto desde la mitad hasta las puntas de tu cabello, evitando la raíz. Déjalo actuar unos minutos y luego enjuaga bien tu cabello con agua tibia o fría.
Seca tu cabello con cuidado
No frotes tu cabello con una toalla para secarlo, ya que puedes dañarlo y encresparlo. Lo mejor es envolver tu cabello con una toalla suave y presionar ligeramente para quitar el exceso de agua. Luego puedes usar un secador de pelo a una temperatura media o baja, manteniéndolo a una distancia prudencial de tu cabello. Usa un cepillo redondo o plano para darle forma a tu corte de pelo mientras lo secas.
Peina tu cabello con el cepillo adecuado
No peines tu cabello cuando esté mojado, ya que puedes romperlo y debilitarlo. Espera a que esté seco o casi seco para peinarlo con el cepillo adecuado. El cepillo debe ser de cerdas naturales o sintéticas suaves, que no dañen ni enreden tu cabello. Peina tu cabello con suavidad y sin tirones, empezando por las puntas y subiendo hacia la raíz. Si tienes el cabello rizado, puedes usar un peine de púas anchas o tus dedos para definir tus rizos.
Protege tu cabello del calor y del sol
El calor y el sol pueden resecar y quemar tu cabello, haciendo que pierda brillo y color. Por eso, debes proteger tu cabello del calor y del sol cuando uses planchas, tenacillas u otros aparatos eléctricos para moldear tu corte de pelo. Usa un protector térmico antes de aplicar el calor sobre tu cabello, y usa una temperatura baja o media. También debes proteger tu cabello del sol cuando salgas al aire libre. Usa un sombrero o una gorra, o aplica un protector solar específico para el cabello.
Corta las puntas de tu cabello regularmente
Para mantener tu corte de pelo en buen estado y evitar las puntas abiertas y dañadas, debes cortar las puntas de tu cabello regularmente. Lo ideal es hacerlo cada dos o tres meses, dependiendo del tipo de corte de pelo que tengas y del crecimiento de tu cabello. No es necesario cortar mucho, solo lo suficiente para sanear las puntas y darle forma a tu corte de pelo.